El expresidente del Gobierno de transición soltó varios gritos en un mitin contra los que se oponían a su gran proyecto frustrado: los salarios diferenciados. Pero para su otra gran obra, fue mucho más silencioso. Otorgó la licencia de ampliación de la mayor mina de oro de Guatemala tres días antes de dejar el cargo. Con Jimmy Morales, el proyecto de Montana sigue adelante.
La condición que puso el ex ministro de Energía y Minas para firmar la ampliación de la mina Marlin fue que la Procuraduría General de la Nación (PGN) considerara legal el proyecto. Así lo dijo varias veces. Así lo repitió por teléfono el 10 de enero de 2016 al referirse a la mayor mina de oro y plata de Guatemala, ubicada entre los municipios de San Miguel Ixtahuacán y Sipacapa, en San Marcos, donde hay dos comunidades en resistencia a la mina.
Lo que no dijo es que para entonces, la PGN, que es el abogado del Estado, ya había dictaminado que consideraba legal ampliar otro kilómetro cuadrado, aunque no formará parte de su zona original de explotación. Y Juan Pablo Ligorría, ex ministro del gobierno de transición, tampoco dijo que no iba a ser él quien firmara la autorización de la nueva área para explotar.
El entonces ministro optó por consultar al respecto de su firma a la Secretaría General y al Departamento Jurídico del ministerio y le sugirieron que se atuviera al reglamento de la Ley de Minería. Según el artículo 21, el único que menciona la ampliación o renuncia de áreas, la entidad que resuelve es la Dirección de Minería.
La autorización fue firmada a principios de enero por el entonces director interino de Minería, Óscar Rosal, personal permanente del ministerio y hoy jefe del departamento de Desarrollo Minero. Montana fue notificada de la autorización el 11 de enero de 2016, tres días antes de que concluyera el mandato del expresidente Alejandro Maldonado. Un mes después, el proyecto sigue adelante bajo la presidencia de Jimmy Morales.
Sin noticias en las municipalidades
Aunque ha transcurrido un mes desde el aviso, las municipalidades de Sipacapa y San Miguel Ixtahuacán no han recibido la documentación. Solo ha sido notificada Montana Exploradora. Esa es la razón que la que la Dirección General de Minería aduce para no compartir la documentación. “Alguien puede oponerse al otorgamiento, todavía no se puede considerar totalmente resuelta la ampliación”, indica Rosal.
Montana Exploradora, la minera subsidiaria de la canadiense Goldcorp, extrae minerales de Marlin a partir de 2003. Y desde 2012 solo trabaja su subsuelo. Hace cuatro años, su director informó de que la mina iría cerrando paulatinamente para finalizar operaciones en 2016. Sin embargo, en 2014, solicitó una prórroga y nuevo subsuelo para trabajar. Por Ley, una mina en Guatemala dispone como máximo de 20 kilómetros cuadrados para explotar su superficie y su subsuelo por 25 años.
En la Ley no se menciona la ampliación, solo aparece en el reglamento, que es un documento que desarrolla conceptos ya establecidos en la Ley. Y ahí queda establecida la duda: cómo desarrollar un tema que no se plantea de inicio en la Ley. La estrategia de Montana para continuar al menos dos años más fue restar un kilómetro ya explotado que no rendía para agregar otro kilómetro cuadrado con potencial en su subsuelo, que no forma parte de su área de explotación. Total: 20 kilómetros cuadrados.
Del Patriota, la transición y FCN
El proyecto de ampliación estuvo detenido por la crisis institucional del gobierno del Partido Patriota por el caso La Línea. Hasta la administración de Juan Pablo Ligorría, que tardó cuatro días, desde que accedió al cargo, en reunirse con el expresidente Maldonado para hablar de la ampliación. “Vaya y haga su trabajo”, dijo el exministro que le respondió Maldonado. Cuatro veces se reunieron entre octubre y diciembre para hablar del tema y una vez visitó Ligorría la mina.
Según confirma en entrevista el viceministro de Minería, Víctor Aguilar, no habrá moratoria a las licencias y eso implica que se agilizarán. En el caso de Marlin, “el proyecto prosigue”, dice Aguilar, petrolero de larga trayectoria, que ya ha sido invitado por Montana a visitar la mina.
La mina ha generado en estos trece años problemas con las comunidades en resistencia Consejo Maya Sipakapense y Frente de Defensa Miguelense (Frenemi), cuyas consultas no han sido tenidas en cuenta por el Estado hasta ahora. “Vamos a incluir a nuestras comunidades olvidadas en nuestros proyectos mineros y petroleros”, dice. “Si hay que hacerlo con Marlin lo haremos con Marlin, vamos a cumplir con lo que diga la Corte. Nos hacemos responsables, hay que reglamentar las consultas, en eso vamos a trabajar”.
Original: Nómada