En El Salvador existe un marco irregular y desmedido por la distribución del agua, el Equipo Impulsor Nacional del Acuerdo de Escazú dió a conocer por medio de un conversatorio sobre "Monocultivos, Gestión Comunitaria del Agua y Acuerdo de Escazú" cifras alarmantes que reflejan la mala distribución del agua entre el sector privado y el Área Metropolitana de San Salvador (AMSS) y la marginación de esta distribución para los pueblos originarios indígenas, rurales y campesinos.

Según los datos mencionan que la empresa cañera llamada COAGRI S.A. DE C.V. utiliza 9332 litros por segundo sólo para el riego del monocultivo de caña de azúcar, de la cual se sustrae del río Aguacayo en el departamento de La Paz. Esta cifra pone en alerta a comunidades y a la Alianza de Pueblos Originarios Lencas, Ulúas y Nonualcos.

84605361 2531897673689713 2715420466473861120 o

Un dato importante es que esta cifra comparada a la disposición del agua que brinda la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA) en el AMSS donde muchas colonias enfrentan una fuerte crisis hídrica es mucho menor con 5500 litros por segundo, a la que se da para el riego de caña.

“COAGRI ya cuenta con 7 permisos sobre el río Aguacayo disponibles para riego, una zona que está estrechamente vinculada con los humedales y manglares y que son áreas protegidas, estos permisos ha implicado que la empresa haya instalado 7 motores para retener el caudal del río Aguacayo y dirigirlo al riego de caña, a lo que se suma los pesticidas, agrotóxicos que se utilizan para la misma actividad, que afectan en la salud como la enfermedad renal crónica en las comunidades” Menciona José Luis Magaña, miembro del equipo Impulsor.

 Por su parte Abel Bernal representante de La Alianza de Pueblos Originarios Lencas, Ulúas y Nonualcos comenta “Conocemos de primera mano como ha sido el uso de la tierra de nuestros antepasados y nos damos cuenta de cosas que no han cambiado, primero hemos conocido que desde La Asamblea Legislativa nunca ha habido una acción que este a favor de la gente que vive en estos territorios, hemos perdido tierras a causa de esto, otra cosa es que se habla de privatizaciones y en el caso del agua,  no la ha habido hasta ahorita, pero existe un robo directo de los bienes que tienen que estar a disposición de las grandes mayorías”.

“La industria de la caña ha sembrado hasta en los pantanos que secó, porque al final todo lo que les permite producir la caña ellos lo ocupan en el territorio, el uso del territorio para señalar como la industria de la caña se aprovecha de estos espacios, nos damos cuenta que nos ha quitado movilización, el ejercicio en la gobernanza de los ríos que sembrábamos cantidades de árboles en las áreas de amortiguamiento, pero ahora la industria de la caña es la que determina como se va utilizar la disposición del agua, los más beneficiosos del agua son ellos” señala.

“Para nosotros no hay ninguna Ley que nos beneficie”

En el seguimiento del conversatorio se habló del Acuerdo de Escazú, pues mencionan que este podría ser La Ley que respalde a los defensores ambientales y que debe de ser ratificada antes del 27 de septiembre. Este instrumento tiene disposiciones para defender a defensoras y defensores ambientales y por lo tanto defensoras del agua, y sobre todo para garantizar derechos de accesos a información y justicia que son claves para dar paso a otros importantes.

César Artiga coordinador del Equipo Impulsor del Acuerdo de Escazú en El Salvador afirma que “este instrumento es valioso de derechos humanos y se espera que sea una realidad para el país, y que toda la ciudadanía se involucre porque es una herramienta clave para avanzar en la democracia en la gobernanza ambiental”.

“Un país como el nuestro que esta en situación de deterioro de los bienes comunes naturales que es agravante y ante los efectos acelerados de cambio climático, es una oportunidad única que tenemos para fortalecer a la ciudadanía” Finalizó.

Website by Heavy Web Design